
En español, la palabra «ocultar» y «revelar» son opuestas. La primera significa encubrir algo, mientras que la segunda, la palabra «revelar», significa exponer algo o darlo conocer. En la Biblia, «revelación» hace referencia a Dios revelando y dando a conocer su verdad a sus criaturas, como somos nosotros. Él toma lo que, de otro modo, nos estaría oculto, y condesciende misericordiosamente para mostrárnoslo. Él no está callado. Nos abre y nos revela el conocimiento de sí mismo y el camino de salvación. Si queremos conocerlo, debemos confiar en lo que él nos dice de sí mismo. Confiar en cualquier otra especulación, solo nos llevará a una mayor ignorancia.